Como Mario Benedetti nos despista, especialmente nos contos. O ritmo, as palavras, as fugas imaginadas (veremos muito disto durante a próxima semana, aqui no George Cassiel):
Persecuta
"Como en tantas y tantas de sus pesadillas, empezó a huir despavorido. Las botas de sus perseguidores sonaban y resonaban sobre las hojas secas. Las omnipotentes zancadas se acercaban a un ritmo enloquecido y enloquecedor.
Hasta no hace mucho, siempre que entraba en una pesadilla, su salvación había consistido en despertar, pero a esta altura los perseguidores habían aprendido esa estratagema y ya no se dejaban sorprender.
Sin embargo esta vez volvió a sorprenderlos. Precisamente en el instante en que los sabuesos creyeron que iba a despertar, él, sencillamente, soñó que se dormía. "
in "Despistes y Franquezas", 1990 (na próxima semana: vários "especiais Benedetti", aqui no George Cassiel) |